Consejos para la colocación de azulejos en techos

Los azulejos en techos se utilizan generalmente en el área de la ducha, o en zonas donde la pared es inclinada, pero requiere de alicatado.

La colocación de azulejos en los techos se aplica, por lo general, en baños y cocinas residenciales, y en comercios y empresas que deben garantizar higiene y limpieza de su producción.

La instalación se puede convertir en algo relativamente sencillo de llevar a cabo, si se cuentan con las herramientas, los materiales de colocación y accesorios adecuados para la tarea, y se siguen ciertas reglas elementales.

Tipos de azulejos para instalación en techos

En el techo pueden instalarse casi todos los tipos de azulejos existentes, tan solo debe tenerse en cuenta su peso y su tamaño. Es conveniente utilizar azulejos pequeños y livianos, ya que se corren menos riesgos de desprendimiento.

El azulejo hidráulico, por ejemplo, es uno de los más pesados, debido a su proceso de fabricación, por lo cual no suele utilizarse en los techos. En los baños o la cocina, el mosaico o los azulejos de formato pequeño son una buena elección.

Baño con azulejos en el techo

Elección del mortero especial para techos

Si bien puede alcanzarse buena adherencia con morteros que, generalmente, se utilizan en la colocación de azulejos en suelo y paredes, es recomendable la utilización de cementos especiales. Con estos es que se puede lograr una óptima adherencia, pues son mucho más plásticos y maleables.

Existen en el mercado varios tipos de morteros a los que solo debe agregarse agua para que comiencen a fraguar. Aunque también es posible encontrar, previamente mezclados, en tubos plásticos y de muy sencillo uso.

Limpieza del soporte

Uno de los primeros pasos en la colocación de azulejos en el techo de un ambiente es la limpieza minuciosa del soporte.

Debe eliminarse todo rastro de polvo y dejar una superficie totalmente homogénea para la correcta adherencia de los cerámicos. Es conveniente la utilización de cepillos de alambre, particularmente en techos de cocinas, para quitar cualquier rastro de grasas que impedirían una adecuada adherencia.

Si el azulejo no se adhiere correctamente al soporte, se desprenderá y caerá al suelo, dañando, además de la pieza que cae, el cerámico instalado en el suelo.

Materiales y accesorios de colocación

Materiales de colocación de azulejos en el techo

Materiales de colocación de azulejos

Para una correcta instalación de azulejos en el techo es necesario utilizar algunos accesorios, además de las imprescindibles cuñas, calzos y alicates, que garantizan una correcta alineación y nivelación.

Los soportes telescópicos regulables son necesarios, especialmente cuando los azulejos tienen un tamaño considerable. Estos mantendrán en su sitio al azulejo unos minutos, hasta que la succión del mortero asegure la adherencia. Es recomendable contar con varios de estos soportes. Generalmente, se emplea un soporte por azulejo, pero es posible colocar varillas entre los soportes, para que sostengan varios azulejos al mismo tiempo.

Los soportes telescópicos son herramientas muy útiles y prácticas de usar. Es posible regular la altura y la posición en la que ajustará con el azulejo, con suma facilidad.

Uno de los inconvenientes de la colocación de azulejos en los techos es la condensación de los vapores. Los azulejos son impermeables y no permiten que la humedad alcance el soporte, sea este techo, suelo o pared. 

Sin embargo, uno de los principales problemas en un ambiente en el que todo se ha alicatado con azulejos, es la condensación. Tanto los que se generan en el baño después de la ducha, o los que aparecen en la cocina mientras se cocinan los alimentos.

Al sellar totalmente la habitación con azulejos, deben existir aberturas que permitan que exista alguna corriente de aire. En aquellos casos en los que la cocina o el baño carecen de ventanas, es conveniente la instalación de un extractor o circulador de aire, que expulse al exterior los vapores de agua del ambiente.

Cómo colocar los azulejos en el techo

El orden en la colocación de azulejos en los techos de una vivienda depende de sus dimensiones.

Por lo general, se comienza colocando la primera línea de azulejos contra una de las paredes y así se continúa hasta la última línea, a la que seguramente, deberá recortarse para su ajuste a esa pared.

  1. Se aplica una capa delgada con llana dentada, primero en el soporte e inmediatamente después en el azulejo.
  2. Luego se coloca el azulejo haciendo una leve presión hacia arriba y hacia uno de los lados, en dirección al azulejo colocado anteriormente.
  3. De ser necesario correr el azulejo hacia uno de los lados, después de asentado y para conseguir un mejor ajuste, se puede adherir una cinta adhesiva para poderlo mover más fácilmente.
  4. A continuación, se colocan los calzos y las cuñas en todas las uniones y se ajustan haciendo uso del alicate, la herramienta indispensable para nivelar los azulejos.
  5. Terminada la colocación y luego de haber transcurrido, como mínimo, 36 horas, se procede al llenado de las juntas.

Limpieza posterior al alicatado 

Después de la colocación de todos los azulejos y del llenado de las juntas, es recomendable utilizar un paño húmedo para quitar el velo del mortero (o el adhesivo) que quedó en la superficie de los azulejos.

Es conveniente realizar esta tarea de limpieza a medida que se van rellenando las juntas, pues de esta forma la tarea se simplifica y se realiza muy rápidamente.

Una vez listo el techo alicatado, el mantenimiento que requiere es simplemente limpiar la superficie regularmente, pues así como los cerámicos de la pared, se salpican con agua o se adhiere sobre ellos el polvo. 

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